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Prof. Oscar Jáuregui
Vargas, primer secretario
general provincial
del SUTEP - Cañete.
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Oscar Jáuregui Vargas y Néstor Vicente Quiroz, leyenda
viva de la lucha magisteria
Se cumple 40 años de fundación del Sindicato Unitario de
Trabajadores de la Educación del Perú, SUTEP, uno de los gremios laborales más
poderosos de nuestro país que suele hacer pasar más de un “dolor de cabeza” a
los regímenes de turno.
Fue un seis de julio de 1972 que en la histórica ciudad
del Cuzco, se consolida el acta de su nacimiento. Pero, su celebración casi
siempre pasa a un segundo plano, dado que los profesores se abocan en la
celebración de su día.
No es para menos. Pero, los comisionados de la fiesta,
deberían poner en su agenda un espacio para recordar esta magna fecha, toda vez
que los docentes cañetanos jugaron un rol muy importante para su consolidación.
Una lucha titánica que ni las balas, ni las botas,
pudieron acallar la voz de los maestros que a unísono exigían al régimen
militar su reconocimiento: “Si no hay solución la huelga continúa”.
Ese grupo de profesores que muchos de ellos aún están con
vida, realizaron en sus años mozos un “trabajo político” en forma
“clandestina”, arriesgando sus vidas y la de su familia que la nueva generación
muy bien deben conocerla.
Uno de ellos es el profesor Néstor Vicente Quiroz, un
luchador social incansable con ideas progresistas y que formó parte de un
engranaje de pléyades sindicalistas como: Horacio Zevallos, Carlos Salazar,
Arturo Vicente, Olmedo Auris y otros para iniciar esta gesta.
Fue precisamente en 1,968 que se inicia esta lucha en el
valle de Cañete a través del Sindicato Único de Trabajadores de la Enseñanza
(SUTE) que agrupaba a todos los profesores de Cañete y que lo encabezó el
profesor Julio Céspedes.
Una lucha frontal, dura y larga, pero que sirvió a los
profesores del resto del país tomar conciencia porque la única alternativa para
conquistar sus reivindicaciones era ganar las calles y que el gobierno debería
oírlos.
Fue así que en el año 1,972 en el histórico congreso del
magisterio realizado en la ciudad del Cuzco, se consolida el SUTEP, tras pasar una
serie de avatares y que hicieron un alto los participantes para reconocer la
iniciativa que había tenido los profesores de la base de Cañete.
“El primer SUTE a nivel nacional nace en Cañete en 1969.
Luego le sigue el SUTE de Huamanga, en los albores del mismo año. Incluso el
nombre del SUTE lo llevamos a otros lugares del país para consolidarse en el
Cuzco hace 40 años”, recuerdo Néstor Vicente.
OSCAR JÁUREGUI PRIMER SECRETARIO GENERAL.
A pesar de su clara posición política, Oscar Jáuregui
Vargas (Conservador), fue ungido como el primer secretario provincial del SUTEP
– Cañete, se puede decir ya en forma orgánica.
Él, recuerda haber formado parte del comité organizador
del gremio sindical y se siente satisfecho de haber cumplido con una de las
tareas más grandes que hoy gozan la nueva hornada de los docentes.
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Prof. Néstor
Vicente Quiroz, primer secretario regional
y otrora dirigente nacional del SUTEP
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Nunca negó su militancia partidaria con el grupo
“derechista” del Partido Popular Cristiano, porque consideró que el SUTEP es un
grupo que suele practicar la doctrina sindical y que en su seno están de todas
las tendencias políticas.
Recuerda que el primer secretario general nacional del
SUTEP, Horacio Zevallos Gámez, le frecuentaba a su domicilio para realizar las
coordinaciones de la lucha sindical y “continuar con la brega hasta la victoria
final”.
Fue partidario de la unidad y recuerda que tuvo suerte
con la arremetida de las fuerzas del orden porque después de muchos años se
entera que el jefe policial era su amigo que le habían dicho a sus subalternos
que “no me tocaran”.
Recuerda a grandes maestros, tal es el caso de Mario Auqui que a pesar de su marcada
posición ideológica, fueron amigos y consideró un gran docente, por ello lo
convocó formar parte del colegio de la CAP San isidro cuando le tocó organizar.
“El SUTE debe buscar un mecanismo para unificar al
magisterio dejando de lado lo extremo y plegarse a la CGTP porque ahí están los
mejores dirigentes, tal es el caso de Olmedo Auris”, recomienda Jáuregui.
Sin duda, hay mucho por conocer sobre la lucha sindical
del mgisterio y que hoy deben merecer un justo y merecido reconocimiento.
También hat mucho por escribir para que las nuevas
generaciones conozcan su pasado y afronten el futuro con éxito sino..."la
huelga tendrá que continùar". (Wilfredo Cayllahua)
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