Exdirigente de trabajadores recibió ocho balazos en
Cañete. Periodista herida en el atentado. CGTP pide decisión política para
frenar muertes. "
Javier Solís
Redacción
El asesinato ocurrió el viernes a las 9 y 30 de la noche.
Los delincuentes dispararon, desde una moto, 15 balazos a quemarropa contra
Carbonero, quien se trasladaba en un vehículo negro de placa LQ-8168 por la
urbanización San Isidro Labrador. La periodista Isabel Vila, quien lo
entrevistaba en el vehículo, resultó herida.
Carbonero, de 35 años, fue hasta marzo de este año el
secretario general del Sindicato de Construcción Civil de la provincia de
Cañete.
Fuentes de la Policía indicaron que el exdirigente
recibió un balazo en la zona de la yugular, otro en el estómago, dos en el
tórax, uno en la cara y tres en la pierna izquierda.
Carbonero fue trasladado inmediatamente al Hospital de
Essalud de Cañete, donde murió.
DECISIÓN POLÍTICA
La periodista Vila también fue llevada de emergencia a
Essalud, donde recibió los primeros auxilios.
Buenaventura Vera, representante del Sindicato de
Trabajadores de Construcción Civil afiliado a la CGTP, dijo a LA PRIMERA que el
condenable asesinato de Carbonero fue perpetrado “de manera impune por las
mafias asesinas con el fin de amedrentar para dar paso libre a las extorsiones
a empresarios”.
Exigió que el gobierno y el Ministerio del Interior
pongan mano dura para frenar estos crímenes. “Es urgente una decisión política
para desarticular las bandas de delincuentes y encarcelar a sus cabecillas,
amparados en seudosindicatos”, dijo.
LOS OTROS MUERTOS
Vera indicó que este asesinato se suma a los homicidios
de los dirigentes sindicales Guillermo Yacila Ubillús, exsecretario general de
Construcción Civil del Callao, y también Rubén Soberón Estela y Armando Viera
Rosales.
El dirigente sindical manifestó que en Cañete existen
seudosindicatos que amparan a estas mafias y que actuarían en San Vicente de
Cañete, Cerro Azul, Imperial y Quilmaná.
“En Cañete hay como cuatro o cinco seudosindicatos que se
enfrentan entre ellos y atacan a nuestras bases, para extorsionar a los
empresarios de construcción y cobrarles cupos, y además meter en la obra a
supuestos obreros y otros de seguridad”, subrayó.
El secretario general de la Confederación General de
Trabajadores del Perú (CGTP), Mario Huamán, manifestó en reiteradas ocasiones
que las mafias actúan amparadas en seudosindicatos reconocidos por el
Ministerio de Trabajo, especialmente durante el pasado gobierno aprista.
Sostuvo que los principales cabecillas de estas mafias
serían el “Cholo Jacinto” y también Augusto Ramos Dolmos, quien fue denunciado
por un empresario por cobrarle 5 mil dólares mensuales.
Agregó que estas mafias cobran a cada obrero un cupo de
40 a 60 soles semanales y también piden “incorporar 20 ó 30 delincuentes en
planilla como obreros para que sigan extorsionando”. “Ellos reciben sueldo y
seguridad social sin trabajar y solo se dedican extorsionar, atacar las obras y
acumular su botín”, afirmó.
En los últimos tres meses, hasta setiembre de este año,
la División de Protección de Obras Civiles de la Policía Nacional intervino a
79 presuntos extorsionadores infiltrados en las organizaciones sindicales de
construcción civil en Lima, Piura y Lambayeque.
LOS SOSPECHOSOS
Calín, Effo y Jalili
La CGTP y la Federación de Construcción Civil condenaron
el asesinato del exdirigente Favio Carbonero y dieron información pública sobre
los posibles autores del crimen.
“Los responsables, según las primeras investigaciones,
serían los delincuentes que responden a los alias de Calín, Effo y Jalili,
vinculados a las mafias de extorsionadores y seudo-sindicatos de la región”,
indica el comunicado de la CGTP.
La central sindical exigió a las autoridades la captura
de los asesinos y pidió al gobierno que ejecute medidas efectivas para eliminar
a estas bandas que ponen en peligro la vida de los trabajadores.
Comentarios