Vicente Sánchez pide una profunda reforma política para superar el caudillismo y acercar el poder a los ciudadanos. No solo debe prohibirse la reelección inmediata de los presidentes regionales sino también debe prohibirse la reelección inmediata de los congresistas y de los alcaldes, porque los principales defectos del sistema político peruano son su falta de institucionalidad partidaria que favorece el caudillismo, la escasa renovación del liderazgo y la conformación de una clase política en cada nivel de gobierno alejada de la gente y que busca entornillarse en el poder, sostuvo Vicente Sánchez Vásquez, precandidato a la Presidencia del Gobierno Regional de Lima por el Movimiento “Confianza Perú”, al comentar la pretendida movilización de los presidentes regionales contra el proyecto de ley que prohíbe la reelección de dichas autoridades.
Rechazó el uso de la población para intereses personales de los presidentes regionales ya que no hay problema de inconstitucionalidad con la no reelección pues tampoco el Presidente de la República puede reelegirse en forma sucesiva. No es lo mismo que el distrito electoral que afectaba un derecho ciudadano elemental, y señaló que dicho proyecto de ley debe ampliarse a los congresistas y a alcaldes, además debe aprobarse la alternancia de género en las listas de candidatos ya que la mujer constituye la mitad del país, debe aprobarse la revocatoria de los congresistas y su renovación por mitades, y si se aprobara la bicameralidad, el Senado debería proceder de las regiones y no elegirse en distrito electoral único que propicia el centralismo limeño.
Es una profunda reforma política la que necesita el Perú pero dudo mucho que los actuales “otorongos” la impulsen, finalizó.
Lima, 28 de mayo de 2009.
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