Hasta el día de hoy sigue impune el atentado contra el ex
alcalde de Huancaya, Abanto Miranda Ravichagua; cuando la ambición por la plata
fácil, por el dinero del pueblo, es capaz de todo.
Aun hoy el pueblo de Huancaya habla del tema porque la
justicia aun no llega. Lo que se oculta para favorecer a criminales.
Se descubre parte de la verdad Cuando el profesor Abanto
desarrollaba su segunda gestión como alcalde, recibió una invitación personal
del aniversario del Jardín del centro poblado de Vilca y como era parte de su
función de representación asistió a dicho acto.
Sin embargo presintiendo de un destino fatal rodeado de
enemigos políticos a quienes había derrotado en diversas contiendas políticas y
como jefe de estos estaba el inefable (“Ishaco”, personaje que jamás asimiló
las sendas derrotas electorales que le propicio) decidió llevar a un
acompañante, al “loco John”. Aprovechando que ese día no había luz en Vilca,
los secuaces del inefable le brindaron licor al ex alcalde y a su acompañante.
Lo planificado
debería ejecutarse, primero embriagarlo completamente al loco hasta que se
quede inconsciente, después “Fidel” con “Javier” empezaron a ofenderle como
acto de provocación, pero en esos momentos los 3 sicarios salen a su defensa y
les aconseja que lo mejor para él es regresar a Huancaya e incluso ellos se
comprometen a cuidarlo y acompañarlo.
Para ese viaje de regreso compran licor para el camino,
la intención clara era embriagarle y desarrollar el fatal desenlace.
Cuando estaba en “Potente” deciden ejecutar lo
encomendado, el hijo de “Fidel” (Mucha) decide forcejear a “Abanto” cuando él
estaba manejando, también “Tantachi” se lanza para ayudarlo pero no calcularon
que “Agucho” iba a desistir, en esa trifulca el carro cae al precipicio,
pensando que ya estaba muerto le roban y lo abandonan. Después de lo sucedido
estos personajes deciden escapar, pero no se dieron cuenta que en el escenario
de los hechos había quedado como huellas del delito sus zapatos.
Después de conocer que Abanto no había muerto estos
personajes viven prófugos, escondidos en las alturas y el autor intelectual
cuelga foto de otro accidente indicando que ese sucedió con Abanto.
Uno de los objetivos era evitar la reelección y gracias a
ese incidente el inefable ahora está ocupando el sillón de la municipalidad.
Un comunero que
madrugaba a su estancia pudo auxiliarlo a Abanto a las 5am, quedando en el
estado actual de discapacidad física pero no intelectual, hasta ahora poca le
importa descubrir la verdad de estos sucesos.
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