Sicarios No Tuvieron Piedad
Por Juan Vladimir Rojas
Hinostroza
Salió a trabajar como todos
los días muy temprano por la actividad comercial que desarrolla en los campos
de cultivos para comercializarlos en los principales centros de abastos de
cañete y la capital.
Rodolfo Oliveros Manero de 50
años llego al promediar las 1:45 p.m. a la balanza electrónica “Montalván Service
E.I.RL.” para empezar el pesaje de la cosecha de camote morado que había comprado
en cerro alegre. El al descender de su camioneta acompañada del dueño del
camote y al llegar al frontis de la empresa recibió más de 8 impactos de bala
de los sicarios que acabaron con su
vida. Los presentes nada pudieron hacer para salvarle la vida el comerciante quien yacía
sin vida en el pavimento.
Hasta el lugar llegaron sus
familiares quienes escenificaron desgarradoras escenas de dolor. La policía con
el ministerio público iniciaron con las investigaciones preliminares con los
testigos para la reconstrucción de la escena del crimen.
Los familiares han señalado
que “los pirañas” (competencia comercial del occiso) serian los responsables de este lamentable hecho. El
occiso deja 2 menores hijos de 3 y 5 añitos de edad en la orfandad. Mientras tanto
familiares y amigos exigen justicia.
DATO
La víctima tenía en su poder más
10 mil nuevos soles en sus bolsillos descartándose un intento de asalto. La hipótesis
sería un ajuste de cuentas por la rivalidad comercial en la compra y venta de tubérculos
en el valle bendito de cañete.
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