Por Vladimir Alexander Rojas Hinostroza
Es significativo y gratificante, que luego de muchos años de esfuerzos
de los empresarios ganaderos de este bendito valle, hoy la provincia de Cañete
sea considerada la segunda cuenca lechera más importante en el escenario
nacional; sin embargo, tal sitial ¿beneficia en realidad a los pecuarios, y a
los consumidores? La interrogante nos debe llevar a comprender y entender para
“quién” o “quiénes” producen los ganaderos.
Y es que si bien, estos pequeños empresarios se han posicionado con una
ubicación envidiable en otras latitudes, ello no necesariamente significa que a
nivel económico u organizacional estén en una situación tan ventajosa como su
producción, que a todas luces está dispersa. La realidad es que a “alguien” le
interesa que se mantengan desunidos, ser meros productores individuales, sin
posibilidades de salirle al frente a ese “alguien” que paga el precio que le da
la gana al momento de acopiar la leche.
Lo antes descrito no es un secreto a voces, y valgan verdades, nuestras
autoridades locales y regionales poco o nada están haciendo para revertir ello.
Por ejemplo, el regalar sementales vacunos a algunas comunidades, o llamarlos a
darles capacitaciones no resuelven el problema de fondo, que no es otro que el
de romper el sistema abusivo del acopio ante un monopolio de nombre GLORIA.
El tema se agudiza más, con la puesta en marcha de QALI WARMA, última
creación de Ollanta Humala para llevar leche a los colegios, pero no comprando
directamente a los ganaderos, sino a una sola empresa – GLORIA – dado que dicho
programa sólo se abastece de leche enlatada, y con eso le cerraron la
posibilidad al consumo masivo y “ahorrativo” de adquirir la leche a sus
verdaderos productores, aunque el diario El Comercio, crea que QALI WARMA ha
destruido el negocio de varios y de mafias. Así como lo lee, para el decano de
la prensa nacional, los productores ganaderos son un lastre que se debe
combatir.
El negocio de la “lata” de leche se puso en marcha, y Cañete no fue la
excepción. La MPC calladita aceptó el programa, que sólo llegará a los
distritos registrados en “pobreza o pobreza extrema”, en buen romance, su
consumo no será masivo. ¡Qué tal paradoja!, para el valle considerado segundo
productor nacional de la leche: En “lata” sólo llegará a un número determinado
de niños, ¿acaso los demás niños cañetanos no tienen el mismo derecho de
recibir y beneficiarse de lo que produce Cañete?
Qué interesante cambio se daría, si alguna autoridad “nuestra” decide
apostar por la leche cañetana. Promover mediantes ferias, spot, o campañas, su
consumo masivo, no sólo en colegios, sino en restaurantes, comedores populares,
y en los miles de hogares. Si se fomentará tal política, es seguro que GLORIA
se quedaría sin muchos productores, y los empresarios ganaderos recibirían el
reconocimiento de un pueblo, que imaginamos no están enterados del 2° lugar que
ocupa Cañete como cuenca lechera.
Lamentablemente, hasta el día de hoy, nadie tiene la “voluntad
política” para detener el abuso de GLORIA. Muchos técnicos desaniman a nuestras
autoridades de la “imposibilidad jurídica” de adquirir en forma directa a los
ganaderos, o de crear programas locales y regionales para el consumo de un
alimento, que todo el mundo se ufana en señalar es indispensable para la salud
de cualquier humano.
Si no apuestan por la alimentación, para quien gobiernan: ¿Para GLORIA,
los ganaderos, o la población?
Comentarios