Bazán Guzmán señaló que está
tranquilo con su conciencia, sin embargo reconoció que la conversación que se
hizo pública días atrás si es de él, y si aparece ahí pidiendo dinero prestado
para afrontar el pago de algunos artistas de la semana de Cañete es por que
“quise poner el pecho, por salvar la fiesta de Cañete, como el caso de Manuel
Donayre, que no quería salir a cantar sino le pagaban, tuve que conseguir
dinero y lo devolví”, señaló textualmente.
Al preguntársele si devolvió
ese dinero con recursos de la municipalidad, fue tajante en señalar que no y
que lo hizo con lo recaudado con la venta de las entradas y las cervezas de esa
noche.
De otro lado, reveló que lo
vienen presionando para que asuma la responsabilidad de pagos de deudas
generado por la semana de Cañete, “yo jamás permitiré que canjeen deuda por una
obra”, enfatizó textualmente, en alusión a que estaría siendo condicionado a
que pague la deuda de préstamo de dinero para la contratación de artistas a
cambio de alguna millonaria obra, como se ha deslizado a través de algunos
medios de comunicación.
Al hacerle la pregunta si él
autorizó la grabación de un vídeo en el que aparece un funcionario de la
municipalidad pagando a un periodista, lo negó “yo no he ordenado eso, por lo
que me reuniré de emergencia con los involucrados y pediré se investigue”,
añadió.
Sobre el caso de la renuncia
del ex asesor de imagen, Martin Trancón, dijo que no fue así ya que le pidió
que se retire ante las especulaciones que tendrían audios y vídeos
comprometedores de él.
“le dije que se retire y saque
los audios y videos que dice tener, yo tengo mi conciencia tranquila”, acotó.
A manera de reflexión, Bazán
Guzmán dijo que a partir de las malas experiencias sufridas, confía menos y
será mano dura.
Cuando se le preguntó sobre el
caso del excesivo costo de la instalación de las casetas de seguridad, aclaró
que la hacer la consulta a CAPECO sobre la construcción, dijo que se ajusta a
ello, pero mostró su observación al costo de la implementación de los costos de
los equipos a instalarse, señalando que conversará con el empresario para que
baje los mismos, ya que considera que es exagerado.
Sin embargo, cuando se le
retrucó que la responsabilidad no era del contratista sino de la misma
municipalidad, reconoció que es así ya que eso debieron haberlo advertido los
funcionarios del departamento de obra que licitaron el proceso y hasta del
mismo comité especial de procesos. (Buenos Días Cañete)
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