La joven deportista de agua es además de una talentosa esquiadora,
embajadora de la Marca Perú.
Glendy Chamorro - 24/07/2019 12:26 pm
La joven esquiadora se ganó el primer
puesto en esquí acuático en la modalidad figuras, superando a fuertes
competidoras de todo el continente en los pasados Juegos Panamericanos del 2015
celebrados en Toronto, Canadá.
Cuglievan ha logrado para el Perú la
tercera presea de este certamen deportivo.
Campeona del deporte en el agua
Tras ganar la tercera medalla de oro
para el Perú, la campeona fue condecorada con el galardón del Colibrí de Plata
por el Estado Peruano designándola como la mejor deportista del 2015.
Además del Colibrí de Plata -muy
importante reconocimiento para un deportista- también se le otorgó la Antorcha
Olímpica en una ceremonia conjunta realizada por el Comité Olímpico Peruano y
el Instituto Peruano del Deporte.
Natalia Cuglievan y su amor al deporte
Con una hermana mayor como Delfina
Cuglievan, quien también es campeona y reconocida en el esquí acuático ha
sabido seguir sus pasos y hacerse su propia carrera que cosecha éxitos.
En casa tenían una laguna en la que
pasaban las tardes calurosas de Tumbes esquiando en el agua a modo de
diversión; sin embargo, este pasatiempo fue más que una actividad de ocio y se
convirtió en su pasión.
El padre de Natalia, Juan Carlos
Cuglievan fundó un Club Bujama Lacus porque también tenía dentro de él el amor
a este deporte y no hizo más que buscar la manera de seguir practicándolo y
permitiendo que sus hijas lo sigan estando en Lima.
Al construir para su familia un club que
permitiera la práctica de este deporte como un hobbie, les abrió las puertas
para continuar una carrera profesional en él.
Además de generar un espacio de
competencia internacional y que atraiga incluso a estrellas del deporte que más
tarde serían entrenadores de Natalia y sus hijas.
Especialista en esquí acuático
Natalia está especializada en ‘figuras’
en esquí acuático porque prefiere hacer trucos sobre su esquí.
En los Juegos Bolivarianos lo demostró
con saltos mortales en 360 y en 540 grados, además de diversas acrobacias que
la hicieron acreedora de la medalla de oro de esa modalidad.
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